Saviors de Green Day, regresa el sonido característico con más fuerza

Comparte
crítica musical

Por Oswaldo Fiscal

Aprovechando que este año se cumple el 30 aniversario del álbum Dookie y el 20 de American Idiot, Green Day, la banda californiana que popularizó el género del punk rock a finales de los 80 parece haber tomado sus discos más populares como puntos de referencia a la hora de crear su nuevo álbum.

La vuelta de Rob Cavallo, productor de ambos discos, después de más diez años sin trabajar junto con la banda, y la voluntad de crear un proyecto más grande y de mayor duración (pasando de los 26 minutos de Father Of All… a los 46 de Saviors) llevaron a Billie Joe y compañía a componer uno de sus mejores álbumes en los últimos años.

Con una gran campaña promocional, que incluso los llevó a tocar en el metro de Nueva York, han conseguido el objetivo de crear un proyecto que los vuelve a poner en el ojo del punk. Saviors está destinado a ser un «disco esencial» dentro de su catálogo.

Lo que tiene Saviors es que es un disco muy disfrutable que recupera viejas sensaciones con guiños a todas sus eras, pero ejecutadas con la energía de una banda que todavía tiene hambre, a pesar de haber conseguido todo en su carrera. ‘The American Dream Is Killing Me’, una mezcla entre ‘Minority’ y ‘Know Your Enemy’, ‘Look Ma, No Brains!’ es puro punk pop super energético.

‘Dilemma’, ha logrado acercamiento al power pop de Nimrod; la simple pero pegadiza ‘Bobby Sox’ con Billie Joe aludiendo a su bisexualidad sobre una secuencia de acordes al estilo Weezer, o las más elaboradas a nivel melódico y de estructura ‘Strange Days Are Here To Stay’ o ‘Fancy Sauce’ son argumentos para que cualquier fan de Green Day pase un muy buen rato escuchándolo.

Las canciones son suficientemente cortas como para que incluso las más flojas (que no tienen un elemento que destaque o llame la atención) como ‘One Eyed Bastard’, con un riff que ellos mismos aceptan que es un plagio de ‘So What’ de P!nk, o más genéricas como ‘Corvette Summer’, pasen rápidamente sin que sean una molestia.

Sin ser un disco muy largo, es inevitable pensar que quitando algunas canciones el disco sería perfecto, sin embargo, tampoco se llega a sentir aburrido ni tedioso al escucharlo.

Tiene picos bajos, como cualquier álbum, pero tampoco llegan a ser malos. Temas como ‘Coma City’, cuenta con un interesante final al estilo The Who, ‘Goodnight Adeline’, con un toque Oasis y un coro que recicla el riff de ‘When I Come Around’, ‘Living In The ’20’s’ o ‘Suzie Chapstick’, sin canciones malas, resultan algo repetitivas respecto a las ideas que presentan en otras.

Sinceramente creo que a estas alturas sería difícil obtener un proyecto más ambicioso. Después de Farher to All… es difícil hacer algo peor, pero en verdad creo que este disco es un gran regreso para la banda de Green Day.

El pop punk está resurgiendo, y discos como este o el de blink-182 que se lanzó el año pasado son prueba de ello.

TE RECOMENDAMOS:

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.