Por Humberto Sánchez
En el mundo de los videojuegos hay dos pilares que son fundamentales para la industria, esos son la creatividad y la innovación, y aunque en la actualidad ya se hayan explorado diversas mecánicas y temáticas, a veces estos dos pilares se pueden ver reflejados en la implementación de elementos ya conocidos, pero empleados de una manera creativa.
Sin embargo, en ocasiones, surge una fina línea entre la inspiración genuina y el plagio descarado, en este artículo, exploraremos este delicado equilibrio, examinando las diferencias entre cuando un juego toma inspiración de otro y cuando cruza la frontera hacia la copia.
La inspiración como motor creativo:
La industria de los videojuegos está llena de casos donde la inspiración se convierte en la principal fuerza detrás de la creación de nuevos títulos, los desarrolladores a menudo se inspiran en los éxitos previos para expandir ideas, mecánicas de juego y narrativas, este proceso de inspiración puede resultar en la creación de juegos que rinden homenaje a sus predecesores mientras aportan nuevas ideas y enfoques.
Un gran ejemplo emblemático de esto es la serie Souls de FromSoftware, juegos como “Dark Souls” y “Bloodborne” han inspirado a numerosos desarrolladores con su enfoque único en la dificultad, el diseño de niveles interconectados y la narrativa sútil.
En lugar de simplemente copiar estos elementos, otros estudios han tomado inspiración para crear experiencias nuevas y emocionantes que rinden homenaje al legado de la serie Souls mientras exploran territorios únicos.
Cuando la Inspiración se desdibuja:
Existe un punto en el cual la inspiración puede convertirse en algo más cuestionable, esto sucede cuando un juego se inspira demasiado en otro sin aportar una contribución significativa o innovadora, lo que puede cruzar la línea hacia el territorio del plagio, esto puede manifestarse en la replicación casi idéntica de mecánicas de juego, elementos visuales o incluso la trama general.
Un caso destacado de este fenómeno es el surgimiento de los llamados “clones” en el mundo de los videojuegos móviles, estos juegos a menudo imitan de una forma descarada el diseño y la jugabilidad de títulos populares en un intento de capitalizar el éxito de otros sin aportar nada original.
Pero esto no solo sucede en los videojuegos móviles, también hay compañías que hacen juegos para PC y consolas, que se dedican a crear copias de los juegos más populares, aunque algunas compañías intentan agregar mecánicas diferentes o una estética distinta, hay otras que simplemente hacen copias, pero de menor calidad al juego original.
El papel de la comunidad y la ética en la industria:
La industria de los videojuegos se encuentra en una constante evolución, es fundamental que tanto los desarrolladores y la comunidad trabajen juntos para promover estándares éticos y fomentar la innovación, si bien la inspiración es una parte natural del proceso creativo, es importante el reconocer y respetar los límites entre la inspiración y el plagio.
Tanto la transparencia como la honestidad por parte de los desarrolladores, son cruciales para mantener la integridad de la industria, los estudios deben esforzarse por reconocer las fuentes de su inspiración y asegurarse de que sus juegos aporten contribuciones significativas y originales al medio.
Por otra parte, los jugadores también tienen un papel importante que desempeñar, ya que deben ser conscientes de las prácticas cuestionables de ciertas empresas, y también deben apoyar a los desarrolladores que promueven la innovación y la creatividad genuina.
En resumen, la línea entre la inspiración y el plagio en la industria de los videojuegos es a menudo borrosa y sujeta a interpretación, pero es importante el tener en cuenta que mientras que la inspiración legítima puede conducir a la creación de experiencias nuevas y emocionantes, el plagio socava la innovación y la integridad de la industria.