Por Oswaldo González
El pasado viernes 8 de septiembre tuve la oportunidad de presentarme junto a mi banda en la Primer Noche Bohemia del Museo Nacional de la Máscara. Una noche llena de música, bebidas deliciosas y un gran ambiente que contagió a todos los asistentes.
Durante casi un año estuvo en mente la idea de esta Noche Bohemia, Emilio Briones, director del museo, nos contactó en una tocada que tuvimos en 2022, y desde entonces nos platicó sobre estas ideas que tenía de abrir el museo para este tipo de eventos y darle oportunidad al talento potosino.
La charla quedó ahí, hasta que a finales de agosto se concretó. Emilio nos convocó a una reunión con diversas bandas, y entre todos platicamos sobre la mejor forma de llevar a cabo el evento.
Sería una mezcla de tres cosas: el pulque, la música y las máscaras. Con todo establecido, llegamos a la fecha acordada.
La gente llegó pronto, una media hora antes de la hora marcada, incluso ya había una larga fila para poder entrar. A las 8:30 de la noche ingresaron, rápidamente los asientos estaban llenos, los pasillos repletos, y el balcón del primer piso de la misma manera. Así dio inicio la primera etapa del evento.
La degustación de pulque fue una idea que surgió por parte del museo, pero que las bandas aprobamos, pues no hay buena música sin buenas bebidas, y que mejor que una bebida tradicional como lo es el pulque, la bebida de los dioses. De diversos sabores, y en pequeñas cantidades, la gente del museo comenzó a repartir el pulque a los asistentes, mientras esperaban a que comenzara la música en vivo.
Y así dio inicio, la música comenzó a resonar en las instalaciones del museo.
El primer músico en presentarse fue Paco Rocanrol, quien con su Rock Urbano puso a cantar a todos los asistentes. Después vino Mi Amor, un proyecto muy particular que no agradó mucho a la gente, pues no recibió el mismo apoyo que Paco. El evento continuó con Un Trago de Pulque, una banda de Rock Folclórico de Tamazunchale, que con sus buenas canciones y sus invitadas devolvieron el ánimo a la gente. Después vino Marter Soma, una banda que cautivó con sus canciones y el carisma de su vocalista Titán Santander. Fuze fue la siguiente banda, un Indie Rock que también fue del agrado de los asistentes. Finalmente llegó Banana Head, tocando clásicos del rock, conocido por jóvenes y adultos, poniendo a cantar a la gente y a las demás bandas.
Durante el evento, entre cada una de las presentaciones, se dieron a conocer los participantes del concurso de máscaras. Cada uno llevaba una máscara distinta, que presentaron al público, y justamente el público fue el encargado de elegir al gran ganador.
Y así concluyó la Primer Noche Bohemia, con una rica degustación de pulque, una máscara ganadora, y muchos músicos que dieron a conocer su talento a la gente de la ciudad. Una Noche Bohemia que dejó un gran sabor de boca, para todos los asistentes, y para mi, que pude vivir todo desde dentro, y ha sido una de las mejores experiencias que he tenido como músico.
