Por Sergio Carrión
Hablar del género de terror en el cine, es hablar de uno de los géneros más problemáticos que existen y con una evolución que tambalea de un lado a otro.
En el siglo pasado, este género pudo entregarnos varias joyas y referentes del cine de miedo que hasta el día de hoy se mantiene, tales como los monstruos de Universal (Frankenstein, Drácula, El Hombre Invisible, etc.), el subgénero slasher (Viernes 13, La masacre de Texas) y como olvidar a la inigualable “El Exorcista” de William Friedkin. Todas estas películas se caracterizaron por su buen uso del suspenso y la intriga que te mantenía al tanto, y que te causaba escalofríos con los diferentes tipos de sorpresa.
Sin embargo, en la actualidad, este género se ha ido un tanto al camino fácil al tener producciones que no se esfuerzan en traer algo de calidad y que solo se preocupan por la cantidad. Tenemos películas que abusan demasiado de la técnica del jumpscare a tal grado de que se vuelve hasta predecible, películas con tramas que solo repiten clichés e historias que se han repetido hasta el hartazgo, y franquicias que están tan desesperadas por seguir siendo relevantes que hasta las exprimen para seguir generando dinero (ejemplo, El Conjuro).
Pese a todo esto que a cabo de mencionar, limitarse a decir que “El género de terror está muerto”, sería caer en la ignorancia. Ya que, en los tiempos modernos, todavía siguen existiendo películas de este género que siguen valiendo la pena, y que han sido realizadas por creativos que sí entienden el género.
Tenemos, por ejemplo, al director Robert Eggers, que nos ha traído películas como “El Faro” y “La Bruja”, o incluso, Ari Aster, que ha traído joyas como “Hereditario” y “Midsommar: El terror no espera al anochecer”, y como no olvidarnos de Jordan Peele, el actor experto principalmente en comedia que sorprendió a Hollywood con propuestas como “Huye”, “Nosotros” y “Nope”.
En el año 2018, el actor estadounidense, John Krasinski, hizo su debut como director con la propuesta del género de terror más original e interesante de la década del 2010 que impresiona tanto a la crítica como al público en general.
“Un Lugar en Silencio” nos contó la historia de la familia Abbott y cómo el guardar silencio era la única forma de sobrevivir a unas horripilantes y mortíferas criaturas que se habían apoderado de la tierra. Él éxito de esta película le garantizó una secuela que se estrenó en 2021 (su estrenó estaba originalmente planeado para 2020 pero por cuestiones de la pandemia, se retrasó un año) que, de igual forma, logró cosechar un éxito similar al de la primera entrega y confirmando más proyectos para esta nueva franquicia.
Ahora en este año 2024, se ha estrenado “Un Lugar en Silencio: Día Uno”. Precuela de la primera entrega que nos relata el comienzo de la invasión alienígena y el descenso de la Ciudad de Nueva York.
¿Qué tal está la película? ¿Vale la pena? Acompáñanos a descubrirlo en esta reseña.
CUANDO EL MUNDO QUEDÓ EN COMPLETO SILENCIO
La historia de esta película nos presenta a Samina, una joven que padece de cáncer que es testigo de como lo que parecía ser otro día normal en su decante vida, se convierte en una gigantesca pesadilla cuando unas criaturas provenientes del espacio caen en la ciudad de Nueva York y empiezan a atacar a cualquier ser vivo localizándolo principalmente por el ruido que se produce. Es así como nuestra protagonista en compañía de su gato Frodo y de un joven tímido llamado Eric, deberán explorar la ciudad ahora convertida en un campo de guerra para encontrar una salida y sobrevivir a cualquier costo.
Si bien había comentado con anterioridad que la secuela tuvo un éxito similar al de la primera entrega, no estuvo exenta de recibir grandes críticas por varios aspectos. El principal de ellos fue sobre que la segunda parte se separaba completamente del rumbo original que se había propuesto en un principio, y que su esencia como película de miedo era completamente inexistente al tener una trama que se asemejaba más a una película de acción.
Es por eso por lo que el principal acierto de la precuela es que logra recuperar lo que hizo grandiosa a la primera entrega, que es básicamente el ser una película que logre darte escalofríos y tensión. Esto se debe a que John Krasinski, director de las dos películas pasadas, ahora le pasa la batuta de director a Michael Sarnoski, director experto en el campo de terror que dirigió la aclamada “PIG” del año 2021, protagonizada por Nicolas Cage.
Parte del mérito de esta película se lo llevan sus respectivos protagonistas, Lupita Nyong´o y Jospeh Quinn. Ambos actores logran darlo todo para ofrecer a unos protagonistas con lo que fácilmente te puedes llegar a encariñar y a presenciar su largo camino de vida o muerte a través de Nueva York. Todo esto a través de momentos que comparten los personajes en pantalla en donde los llegamos a conocer mejor, y en especial por un momento que sucede casi llegando al clímax. Pero la que sin duda se termina robando la película es la misma Lupita, ya que tiene bastante experiencia interpretando a personajes con trasfondo emocional.
Si tuviera que decir algo negativo de esta película, tendría que ver con el personaje de Eric y su introducción a la historia. Sin entrar demasiado en spoilers, la introducción de este personaje se llega a sentir algo repentina y apresurada dentro de la película, con esto no digo que el personaje no sea de importancia dentro de la historia, pero en su primera aparición parece que lo metieron con calzador. No hubiera estado de más haber visto un flashback en donde veamos el comienzo del apocalipsis desde su punto de vista.
UNA PRECUELA QUE ES MUCHO MÁS DE LO QUE APARENTA
Lo siguiente que voy a decir más que un acierto es un aviso. Ya que a diferencia de todo lo que se ha dicho de esta película, una vez viéndola te das cuenta de que tiene sus respectivas sorpresas, pero dichas sorpresas podrían estar relacionadas con el futuro de la franquicia.
Sin entrar en demasiados spoilers (en especial en los más cañones), la película introduce nuevos elementos que no se habían explorado en la franquicia hasta ahora. Características que tienen la pinta de ser relevantes para la ya confirmada tercera entrega y que podrían indicar que sabríamos más de las criaturas invasoras próximamente. Esto no es de extrañar, ya que John Krasinski estuvo involucrado en el desarrollo de esta película como productor y supervisor, por lo que estos detalles ya son obra suya.
Algo similar a esto ya había pasado en “Un Lugar en Silencio Parte 2”, en donde al comienzo podemos presenciar parte de los primeros días de la invasión desde el punto de vista de la familia Abbott. Secuencia que ya adelantaba la existencia de esta precuela y de cómo se desarrollaba en las grandes ciudades.
Todo esto provoca que el espectador quiera ganas de más y este ansioso por ver lo que depara el futuro de esta franquicia.
ESTO FUE SOLO EL COMIENZO
Un Lugar en Silencio: Día Uno es una precuela que logra hacerle justicia a una idea que parecía haberse desviado un poco. Contando con unos protagonistas admirables, momentos que cautivan e intrigan, y un director que entendió lo que hizo a esta franquicia tan especial en primer lugar, esta película no solo restablece lo que ya sabíamos hasta ahora, sino que también deja pistas de lo que puede llegar a pasar en futuras entregas y que servirán para entender mejor a este mundo creado por John Krasinski.
“Un Lugar en Silencio Parte 3” todavía se encuentra en etapas muy tempranas de desarrollo, pero no creo que tengamos que esperar mucho para saber que le depara a los personajes en el futuro.